-Por solicitud de la comunidad, en esta mesa de dialogo se pidió la presencia de la Policía Nacional y demás autoridades competentes, como parte de la reconciliación.
-El alcalde local, Jaime Vargas Vives, propuso realizar jornadas recreativas, culturales y deportivas que sirvan como un espacio de construcción, reparación y reconciliación.
Bogotá D.C. 24 de septiembre de 2020. El pasado 23 de septiembre se realizó la segunda mesa de diálogo en la UPZ 9 Verbenal de la localidad de Usaquén, a la cual asistió la comunidad, la Alcaldía Local de Usaquén, la Policía Nacional, el IDPAC, la Secretaría Distrital de Gobierno y la Personería de Bogotá.
Esta mesa de reconciliación, organizada por los habitantes del sector, busca verdad, justicia, reparación y no repetición a los hechos ocurridos el 9 de septiembre, donde 3 jóvenes de la localidad perdieron la vida en el barrio Verbenal por impacto de bala en las protestas contra la Policía Nacional que iniciaron por presuntos abusos policiales, hechos que son materia de investigación.
El Mayor de la Policía, Cesar Ramírez, aseguró que esa fue la primera intervención de la Policía en la localidad después de los hechos, afirmó que “la Policía es de la comunidad y para la comunidad” y pidió perdón, lo cual había sido reclamado y exigido de modo urgente por los habitantes de Verbenal, en la anterior mesa de diálogo.
El alcalde local, Jaime Vargas Vives, propuso realizar jornadas recreativas, culturales y deportivas que sirvan como un espacio de construcción, reparación y reconciliación. También sugirió instalar reuniones sectoriales, donde se presenten las problemáticas y necesidades principales, para tratarlas con los entes correspondientes y así asegurar la no repetición de estos hechos.
La comunidad de la UPZ 9 Verbenal, exigió a las autoridades una actuación clara y transparente frente al proceso de investigación y reconocimiento de la responsabilidad, además de una reforma policial al CAI del sector, que incluya un reemplazo de todos los policías. Así mismo, solicitaron apoyo legal y protección a las familias de las víctimas y a los voceros del barrio, pues han recibido amenazas después de los acontecimientos mencionados.
Para reconstruir el tejido social, es necesario el trabajo conjunto de la comunidad y las entidades, con el fin de recuperar la confianza, lograr el perdón y avanzar en el camino de reparación y reivindicación de las víctimas.
